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Intoxicaciones agudas en el Centro de Emergencias del Hospital General Docente Enrique Cabrera, 2009-2010: serie clínica retrospectiva

Acute intoxications in the Emergency Center of the “Enrique Cabrera” General Teaching Hospital, 2009-2010: retrospective clinical series

Resumen

Introducción: las intoxicaciones agudas son una emergencia médica determinada por la exposición a diferentes sustancias, las cuales pueden terminar con la vida del paciente. Objetivos: caracterizar los pacientes con intoxicaciones agudas atendidos en el Centro de Emergencias del Hospital General Docente Enrique Cabrera, La Habana, desde el 1 de enero de 2009 hasta el 31 de diciembre de 2010. Método: se realizó un estudio de serie clínica retrospectiva en 208 pacientes con intoxicaciones agudas. Se seleccionaron las variables para el estudio según los objetivos y se construyeron distribuciones de frecuencias absolutas y relativas. Resultados: predominaron los pacientes del sexo femenino y del grupo etario de 20 a 29 años. La intención de suicidio fue el tipo de intoxicación más frecuente y el tipo accidental mostró aumento según mayor edad. Los medicamentos fueron los agentes etiológicos más utilizados, predominando los psicofármacos y el uso de polimedicamentos en la intención de suicidio. La bronconeumonía bacteriana fue la complicación más frecuente de los casos ingresados. Conclusiones: Se apreciaron intoxicaciones principalmente en mujeres de edad joven y presentarse con intención suicida, siendo los medicamentos los agentes más utilizados.

Introducción

Las intoxicaciones agudas representan un complejo síndrome que agrupa síntomas y signos como resultado de la exposición súbita a cantidades tóxicas de una sustancia química, que pueden llevar incluso a la muerte1,2. Numerosas son las sustancias capaces de producir intoxicación al ser humano y pueden estar presentes en el entorno laboral, en el hogar y en general en el ambiente3. Las intoxicaciones pueden ocasionar una morbilidad y mortalidad importante, donde la actuación médica debe ser apropiada e inmediata. La absorción de un tóxico sucede a menudo con mucha rapidez, por lo que las intoxicaciones constituyen una verdadera urgencia médica3.

Según estadísticas a nivel mundial, de cuatro a seis por cada diez mil personas sufren anualmente una intoxicación grave. Se estima que en Estados Unidos cada año se producen cinco millones de casos de intoxicaciones y 300 mil ingresos hospitalarios. Asimismo, las cifras de fallecidos reportadas por dicha causa son más de 30 mil por año4. Sin embargo casi todos los pacientes que acuden al hospital sobreviven con los cuidados apropiados, por lo que las cifras de mortalidad reportadas son inferior al 0,05%5-7.

En Cuba, las lesiones autoinflingidas se encuentran dentro de las diez primeras causas de muerte. En el año 2010 se reportaron tasas de 13,7 por 100 mil habitantes y un aumento de las tasas de defunciones por dicha causa en relación a 20098. Nos propusimos caracterizar los pacientes con intoxicaciones agudas atendidos en el Centro de Emergencias del Hospital General Docente Enrique Cabrera durante el período 2009-2010.

Métodos

Se realizó un estudio de serie clínica retrospectiva en pacientes con intoxicaciones agudas por agente exógeno no biológico atendidos en el Centro de Emergencias del Hospital General Docente Enrique Cabrera, durante el periodo comprendido desde el 1 de enero de 2009 hasta el 31 de diciembre de 2010. La información se obtuvo a partir de la revisión de todas las historias clínicas realizadas en el cuerpo de guardia según el modelo 54-08-1, que es el registro estadístico establecido por el Ministerio de Salud Pública de Cuba para estos casos. En él se detalla el motivo de ingreso, síntomas principales, signos encontrados al examen físico, impresión diagnóstica, exámenes complementarios, conducta médica y estado del paciente al momento de egresar. Este modelo permite la estandarización en la recogida de datos y el manejo de los casos.

Se revisaron además las historias clínicas de aquellos pacientes que requirieron ingreso hospitalario por complicaciones propias de la intoxicación. Se confeccionó una planilla de recolección de datos con todas las variables de estudio para cumplir los objetivos propuestos. Se consideró intoxicación accidental cuando ésta se produjo por error en la manipulación de la sustancia tóxica. Se considera intención de suicidio cuando se produjo por la exposición al tóxico con la finalidad de atentar contra la vida propia. Las intoxicaciones por abuso se presentan cuando ésta se produce por drogadicción. Se consideró a cada paciente como única vez en el estudio, existiendo sólo dos casos reincidentes en el período estudiado y siendo excluidas las ocasiones reincidentes según fue establecido previamente. Se estudiaron 208 casos de intoxicaciones agudas por agente exógeno no biológico que correspondió al total de pacientes mayores de 14 años. La información se transcribió a una base de datos en formato Excel. Posteriormente, los datos se exportaron al programa estadístico SPSS versión 13.0 para Windows para su análisis.

Como medidas de resumen se construyeron distribuciones de frecuencias absolutas y relativas. No se aplican técnicas de estadística inferencial por estudiarse el total del universo. El estudio contó con la aprobación del Comité de Ética de la Investigación del Hospital General Docente Enrique Cabrera.

Resultados

Predominaron los casos en mujeres (71,2%). La intención de suicidio fue el tipo más frecuente en ambos sexos (76,9% del total de casos) y en el sexo femenino alcanzó 86,4%. En varones, la intención de suicidio fue 53,3 %,  31,7% por abuso y 15 % accidentales (ver Tabla I).

Intoxicaciones agudas según tipo de intoxicación por sexo. Hospital General Docente Enrique Cabrera, 2009-2010. Fuente: planilla de recolección de datos.
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El mayor número de casos correspondió al grupo de 20 a 29 años para ambos sexos (29,8%). En la intención de suicidio, 82,3 % estuvieron comprendidos en ese grupo etario. La intoxicación por abuso (12%) fue más frecuente en grupos de edades jóvenes. La intoxicación de tipo accidental mostró tendencia al aumento según los grupos de edad se hacían mayores (ver Tabla II).

Intoxicaciones agudas según tipo de intoxicación por edad. Hospital General Docente Enrique Cabrera, 2009-2010. Fuente: planilla de recolección de datos.
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El uso de los medicamentos fue la principal causa de intoxicación. Los psicofármacos, combinación de polimedicamentos y anticonvulsivantes fueron los más frecuentes en la intoxicación por intención de suicidio (26,4%, 24,5% y 14,9% respectivamente). En la intoxicación por intención de abuso estuvo presente el uso del alcohol solo o en combinación con medicamentos. Las intoxicaciones accidentales fueron fundamentalmente por productos del hogar y por anticonvulsivantes como podemos observar en la Tabla III.

Intoxicaciones agudas según agente causal por tipo de intoxicación. Hospital General Docente Enrique Cabrera, 2009-2010. Fuente: planilla de recolección de datos.
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No se presentaron complicaciones en 175 pacientes, lo que correspondió a 84,1%. De ellos 162 casos (77,9 %) tuvieron una estadía de hasta 48 horas. La complicación más frecuente fue la bronconeumonia bacteriana intrahospitalaria (17 casos) en pacientes que permanecieron ingresados 3 o más días como se observa en la Tabla IV.

;;;;Tabla IV. Intoxicaciones agudas según complicaciones por estadía hospitalaria. Hospital General Docente Enrique Cabrera, 2009-2010. Fuente: planilla de recolección de datos.
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En el período estudiado egresaron vivos 202 pacientes, lo cual representó el 97,1% y fallecieron 6 casos que correspondió al 2,9 %.

Discusión

Numerosas publicaciones en los últimos años han abordado el comportamiento de las intoxicaciones agudas. Desde 1965 se comienza a considerar la autoagresión medicamentosa como una “moda” de la segunda mitad del siglo XX.

El predominio de las intoxicaciones exógenas agudas en el sexo femenino ha sido reportado por numerosos autores. Estudios realizados en países de Europa han señalado entre 70 y 80% de casos femeninos en las intoxicaciones agudas9-11. Sin embargo, un trabajo realizado en Chile en 2004 que abarcó un período de 10 años refirió sólo 46% de los casos del sexo femenino12. En Cuba, un estudio realizado en el Centro Nacional de Toxicología durante el período 2001-2005 reportó que 62% de los casos correspondió al sexo femenino13. La mayor frecuencia de intoxicaciones agudas en mujeres se puede explicar debido a que ellas están más expuestas a tensiones de la vida cotidiana como divorcios, muerte de algún hijo, ser madre soltera sin apoyo económico, carencias económicas o migraciones. A esto se unen factores biológicos que predisponen a la depresión y al mayor uso de psicofármacos14.

Encontramos un mayor número de casos de intoxicación como intención de suicidio. En un estudio realizado en España y publicado en el año 2012 se reportó sólo un 18% de casos como intención de suicidio, no coincidiendo con las cifras encontradas en nuestro estudio15. En otros países europeos como Turquía, las cifras de intención de suicidio fueron de 63%9. Otros trabajos en Cuba mostraron intencionalidad en 60% de los casos13. Actualmente la conducta suicida es considerada como un hecho de causas multifactoriales en el que intervienen factores biológicos, psicológicos y sociales16. El intento suicida y el suicidio propiamente tal son las dos formas más representativas de la conducta suicida, aunque representa un continuum que va desde la idea suicida hasta el suicidio. La Organización Mundial de la Salud estima que por cada 1000 personas que se suicidan, ocurren de 10 a 15 intentos suicidas17.

Las intoxicaciones ocurrieron principalmente en edades jóvenes. Estudios realizados en Estados Unidos mostraron frecuencia de intoxicaciones en el grupo etario de 15 a 24 años, con resultados de 40 y 55%, similar a nuestro trabajo si sumamos ambos grupos de edades18,19. En algunos países europeos se ha demostrado un incremento de las intoxicaciones entre los grupos más jóvenes (20- 22). Consideramos que en las edades tempranas el individuo se encuentra más expuesto a sustancias tóxicas por razones laborales y también por factores de riesgo como las relaciones conflictivas con los padres y convivientes, rebeldía, impulsividad, timidez, discrepancias con las parejas, ruptura del noviazgo, problemas económicos, deserciones escolares o problemas laborales, alteraciones del comportamiento sexual, embarazos no deseados, entre otros. Todos estos hechos pueden originar actitudes suicidas3.

Los medicamentos constituyen la principal causa de intoxicación, lo que concuerda con lo reportado por otros estudios4,7,15,18,22. En un estudio realizado en un hospital universitario de Holanda se reportó el abuso de drogas como principal causa de intoxicaciones, seguido de los medicamentos. Entre estos últimos, las benzodiacepinas significaron el 55% de los casos. Asimismo, en 15% de los casos los responsables fueron los antipsicóticos y antidepresivos23. En otros trabajos se han señalado las benzodiacepinas, los antidepresivos tricíclicos, el paracetamol y los antiinflamatorios no esteroideos como los medicamentos más utilizados en las intoxicaciones24,25. Al parecer, la supremacía de los medicamentos se debe a la disponibilidad y consumo de éstos por la población, muchas veces como automedicación. En Cuba los psicofármacos, que representan un arma terapéutica de primer orden para el abordaje de depresiones y trastornos afectivos, son comúnmente indicados por los médicos de la Atención Primaria de Salud. Por esta razón, al contar con ellos en sus casas los pacientes pueden usarlos ellos mismos o sus familiares con fines lesivos. A pesar de las múltiples disposiciones del Ministerio de Salud Pública orientadas a restringir la disponibilidad liberada de medicamentos, existe un amplio acceso a ellos por parte de la población. Es por esto que deberá insistirse en el papel del médico en controlar las indicaciones y educar a la comunidad sobre el uso adecuado de los fármacos.

La literatura reporta que las complicaciones que se presentan durante la evolución de los pacientes con intoxicaciones agudas dependen del tóxico causante del evento toxicológico, de la cantidad de sustancia absorbida y la precocidad en la imposición de una terapéutica adecuada29. En otros trabajos realizados en Cuba de pacientes ingresados en Unidades de Cuidados Intensivos por intoxicaciones agudas, las complicaciones respiratorias como el distrés respiratorio y la bronconeumonia fueron las más frecuentes lo cual coincide con nuestro trabajo26,27.

No existen trabajos realizados con anterioridad sobre las intoxicaciones agudas en el Centro de Emergencia del Hospital Enrique Cabrera, razón por la que este trabajo abre nuevas y numerosas interrogantes sobre este tema que deberán ser objeto de investigaciones futuras. La fortaleza de este trabajo radica en la rigurosidad de los datos recogidos a partir de un modelo estadístico único, lo cual permite validar los resultados mostrados. Al no tener este hospital una unidad psiquiátrica, en el momento del alta los pacientes son trasladados a otro centro para su evaluación. Esta situación no permite su seguimiento posterior, hecho que de ser realizado hubiera enriquecido este y otros trabajos futuros. Sería recomendable establecer vínculos informativos entre este centro asistencial y la unidad psiquiátrica a donde son remitidos estos casos.

Conclusiones

Las intoxicaciones agudas atendidas en el Centro de Emergencias del Hospital Enrique Cabrera de 2009 a 2010 se caracterizaron por predominar en el sexo femenino, en edades jóvenes y presentarse con más frecuencia como intención de suicidio. Los medicamentos fueron los agentes etiológicos más utilizados y la unión con alcohol fue mayor en el grupo etario de 15 a 19 años. La bronconeumonia bacteriana intrahospitalaria fue la complicación más frecuente de los casos ingresados en el hospital.

Notas

Declaración de conflictos de intereses

Los autores han completado el formulario de declaración de conflictos de intereses del ICMJE traducido al castellano por Medwave, y declaran no haber recibido financiamiento para la realización del artículo/investigación; no tener relaciones financieras con organizaciones que podrían tener intereses en el artículo publicado, en los últimos tres años; y no tener otras relaciones o actividades que podrían influir sobre el artículo publicado. El formulario puede ser solicitado contactando a la autora responsable.