Consenso

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Revisión de la literatura sobre tratamiento del cáncer de mama localmente avanzado

Review of the literature on treatment of locally advanced breast cancer

Contenidos

Introducción
Objetivos Específicos
Metodología y Resultados de la Búsqueda de la Literatura
Síntesis de la Evidencia y Recomendaciones
1. ¿Cuáles son las Indicaciones y Esquemas de Inducción Recomendados de Quimioterapia, Hormonoterapia y Tratamientos Monoclonales en Cáncer de Mama Localmente Avanzado?
2. ¿Cómo se Debe Evaluar la Respuesta al Tratamiento Neoadyuvante Durante y Después de Éste, en el Cáncer de Mama Localmente Avanzado? ¿Cuál es el Rol de la Ecografía, la Mamografía, y la Resonancia Magnética (RM)?
3. ¿Cuál es el Manejo Recomendado para el Cáncer Inflamatorio de la Mama?
4. ¿Cuáles son las Indicaciones y Esquemas en Quimioterapia Adyuvante en el Uso Posterior a Quimioterapia Neoadyuvante?
5. ¿Cuáles son las Indicaciones de Radioterapia en Cáncer de Mama Localmente Avanzado con Respuesta Histológica Completa y Respuesta Histológica Parcial?
6. ¿Cuáles son las Indicaciones de Cirugía Conservadora en Cáncer de Mama Localmente Avanzado?
Referencias

Introducción

El cáncer de mama localmente avanzado (CMLA) incluye una amplia gama de presentaciones clínicas de la enfermedad: los tumores inoperables, los tumores en etapa III operables y el cáncer de mama inflamatorio (CMI), siendo ésta última una entidad con características patológicas y clínicas diferentes y con cambios genéticos únicos.

La terapia sistémica del CMLA es la quimioterapia neoadyuvante (QTNA), la que ha reemplazado a la quimioterapia adyuvante (QTA) con iguales resultados en supervivencia libre de enfermedad (SLE) y supervivencia global (SG). La QTNA se ha desarrollado con el objetivo de hacer operables tumores considerados inicialmente inoperables, de mejorar la supervivencia y de tratar precozmente la enfermedad micrometastásica. Además, ha permitido la conservación de la mama en subgrupos muy seleccionados de pacientes.

Hoy en día la QTNA se considera la terapia estándar del CMLA, ya que sus eventuales desventajas, el atraso de la terapia loco regional en los tumores no respondedores (5% del total) y el posible desarrollo de multi resistencia a drogas, son mucho menos que sus ventajas.

Uno de los mayores riesgos de la cirugía conservadora en el CMLA es la mayor tasa de recidiva local observada, lo que se intenta disminuir con una adecuada selección de las pacientes para recibir esta modalidad terapéutica.

Un pequeño número de pacientes tratadas con QTNA obtiene respuesta histológica completa tanto en el tumor mamario como en la axila, lo que ha permitido identificar un subgrupo de pacientes con mejores tasas de supervivencia.

Basados en el Consenso del 2003, se intentarán determinar las indicaciones y los esquemas del tratamiento sistémico del CMLA, definir los métodos de evaluación de la respuesta a este tratamiento, establecer el manejo del CMI, definir el rol de la RT y de la cirugía conservadora en estas pacientes.

Objetivos Específicos

  • ¿Cuáles son las indicaciones y esquemas de inducción recomendados de QT, HT y de tratamientos biológicos en CMLA?
  • ¿Cómo se debe evaluar la respuesta al tratamiento neoadyuvante durante y después de éste, en el CMLA? ¿Cuál es el rol de la ecografía, la mamografía, y la RMI?
  • ¿Cuál es el manejo recomendado para el cáncer inflamatorio de la mama?
  • ¿Cuáles son las indicaciones y esquemas en QT de uso posterior a la quimioterapia neoadyuvante?
  • ¿Cuáles son las indicaciones de radioterapia en cáncer de mama localmente avanzado con respuesta histológica completa o respuesta parcial a la QTNA?
  • ¿Cuáles son las indicaciones de cirugía conservadora en cáncer de mama localmente avanzado?

Metodología y Resultados de la Búsqueda de la Literatura

La estrategia de búsqueda se centró en el uso de la red con motores de búsqueda, multibuscadores y uso de bases de datos bibliográficas: pubmed-medline, bases de datos accesibles a través de bireme, fisterra y buscamed.

Se analizaron sólo trabajos en que se consiguió el texto completo, especialmente en español, inglés y francés.

Síntesis de la Evidencia y Recomendaciones

1. ¿Cuáles son las indicaciones y esquemas de inducción recomendados de quimioterapia, hormonoterapia y tratamientos monoclonales en cáncer de mama localmente avanzado?

Sintesis de la evidencia:

Se seleccionaron 29 estudios: 2 guías clínicas, 10 revisiones no sistemáticas de la literatura, 3 meta análisis de ensayos aleatorizados, 2 ensayos aleatorizados individuales, 2 ensayos fase II, 6 estudios de cohorte, 3 series de casos y un estudio de pruebas diagnósticas.

Quimioterapia neoadyuvante:
La QTNA es considerada la terapia estándar para el CMLA. Existe acuerdo en que la poliquimioterapia es más eficaz que el uso de monodroga (Berruti, 2008). Se han evaluado diversos esquemas en ensayos fase III, administrados tanto en secuencia como combinados, los que no han mostrado superioridad uno sobre otro (Buzdar, 2007; von Minckwitz, 2008).
Nivel de evidencia I.

Los esquemas basados en doxorubicina son los más estudiados como terapia inicial y sus resultados demuestran una disminución del 50% del tamaño tumoral en más del 75% de los casos (Lee 2007). Se ha observado además que la incorporación del uso secuencial de taxanos aumenta la tasa de respuesta y de cirugía conservadora en pacientes seleccionadas (El Saghir, 2008; Berruti 2008).

Nivel de evidencia I.

Pacientes con multicentricidad o multifocalidad tratados con neoadyuvancia basada en doxorubicina no tienen un riesgo mayor de recidiva loco regional, comparados con lesiones únicas (Oh, 2006).

Nivel de evidencia II.

Quimoterapia postoperatoria:
Dos metaanálisis de ensayos aleatorios han mostrado que dar quimioterapia pre o post cirugía no muestra diferencias en la supervivencia global (SG), en la progresión ni en la recurrencia de la enfermedad, pero los resultados varían de acuerdo a la inclusión o exclusión de las pacientes que no reciben RT, así como los estudios en los que una proporción significativa de la población recibió radioterapia exclusiva y la cirugía fue excluida del tratamiento. Los hallazgos enfatizan la importancia de la incorporación de la cirugía en el manejo loco-regional después de la administración de la QTNA, aunque haya ocurrido la desaparición completa del tumor. Es conocido que la radioterapia reduce el riesgo de recurrencia loco-regional, incluso después de la mastectomía (Mieog, 2008; Mauri, 2005).

Nivel de evidencia I.

Hormonoterapia:
La hormonoterapia neoadyuvante (HTNA) con inhibidores de aromatasa (IA) tiene una efectividad similar a la QTNA en pacientes postmenopáusicas con cáncer de mama RE (+) y/o RPg (+) especialmente en aquéllas con niveles altos de expresión de receptores hormonales (Valenzuela, 2008). Se sugieren al menos entre 3 y 4 meses de tratamiento como terapia neoadyuvante, considerando además la velocidad de la respuesta (disminución de 50% del tamaño tumoral en 90 días de tratamiento) (Lee, 2007; Beresford, 2007).

Nivel de evidencia I.

Los IA serían más efectivos (mayor tasa de respuesta clínica y posibilidad de efectuar cirugía conservadora) que el tamoxifeno en mujeres post menopáusicas (ensayos Letrozole p024, PROACT, Exemestan Study; Lee, 2007; Valenzuela, 2008; Wolf, 2002; El Saghir, 2008), especialmente el letrozole y el exemestane (Berruti, 2008).

Nivel de evidencia I.

La evidencia está limitada a estudios en pacientes postmenopáusicas (especialmente > 70 años), pero hay estudios en curso con nuevos antiestrógenos que incluyen pacientes premenopaúsicas, asociados a inhibidores del eje LH-RH.

Anticuerpos monoclonales:
El trastuzumab asociado a QTNA aumenta las respuestas completas patológicas en pacientes Her 2 (+) (El Saghir, 2008; Hurley, 2006; Madarnas, 2008).

Nivel de evidencia I.

Los esquemas con trastuzumab concomitantes con antraciclinas tienen alta toxicidad cardíaca comparado con el uso secuencial de estos agentes: 27% vs ≈ 3% (Dawood, 2007).

Nivel de evidencia I.

Recomendaciones:

  • Completar 6-8 ciclos de QTNA.
  • Controlar la respuesta tumoral cada 3-4 ciclos y si no se observa respuesta clínica luego de 4 ciclos, efectuar tratamiento loco regional.
  • No asociar el tamoxifeno durante la QTNA.

La QTNA está indicada en pacientes con tumores inoperables, en pacientes con tumores operables con posibilidad de conservación mamaria y en pacientes con cáncer inflamatorio.

El trastuzumab debe ser administrado en forma secuencial respecto de la QT debido a la toxicidad del trastuzumab concomitante con la toxidad de la QT.

En cuanto a los esquemas recomendados, se plantean las siguientes opciones:

  • FAC o FEC x 6 ciclos
  • AC x 4 ciclos  docetaxel x 4 ciclos cada 21 días +/- trastuzumab
  • AC x 4 ciclos  paclitaxel semanal x 12 ciclos +/- trastuzumab
  • docetaxel + carboplatino x 4 ciclos +/- trastuzumab

La hormonoterapia neoadyuvante (HTNA) se puede indicar en pacientes con tumores hormonosensibles, con niveles altos de expresión de receptores hormonales y puntajes 8 Allred.
En pacientes postmenopáusicas se recomienda el uso de los inhibidores de aromatasa (IA), sin observarse ventajas significativas entre los diferentes IA.

En pacientes premenopáusicas se puede ofrecer HTNA frente a rechazo o contraindicación de QT la que puede ser efectuada con tamoxifeno o con IA asociados a supresión ovárica.

La duración de la HTNA debe ser de al menos 3-4 meses, con control mensual para evaluar respuesta y posible progresión.

2. ¿Cómo se debe evaluar la respuesta al tratamiento neoadyuvante durante y después de éste, en el cáncer de mama localmente avanzado? ¿Cuál es el rol de la ecografía, la mamografía, y la resonancia magnética (RM)?

Síntesis de la evidencia:

Se seleccionaron dos revisiones de la literatura y diversos estudios de pruebas diagnósticas de calidad heterogénea, especialmente comparando las imágenes convencionales con las de uso más reciente. Además se incluye en esta síntesis los conceptos revisados en el capítulo de resonancia mamaria del presente consenso.

Nivel de evidencia I-II.

Para poder evaluar la respuesta al tratamiento neoadyuvante en el CMLA, éste debe ser precedido por el estudio con imágenes. Si bien el examen clínico y las imágenes convencionales, la mamografía y el ultrasonido, son los métodos reconocidos internacionalmente para cuantificar la respuesta tumoral a la quimioterapia neoadyuvante (Peitinger, 2006; Lee, 2007), existe una subestimación de esta respuesta en los cánceres lobulillares y una sobrestimación en los cánceres pobremente diferenciados (Peintinguer, 2006). La mayoría de los autores han comprobado que existe una mejor concordancia entre la histología y la RM en la evaluación del tamaño tumoral después de la QTNA con coeficientes de correlación que van desde 0,75 a 0,89, superiores a los de los métodos convencionales (Tardivon, 2006; Yeh, 2005; Rieber, 2002; Londero, 2004; Hylton, 2008; Kuhl, 2007; Garimella, 2008; Chen, 2007).

Para evaluar el efecto sobre el tumor, se debiera realizar otra RM durante la quimioterapia. Este es el estudio de elección ya que ha demostrado ser superior al examen clínico, a la mamografía y al ultrasonido, en la decisión de un cambio en la conducta quirúrgica o del esquema de quimioterapia. Los parámetros más relevantes que pueden predecir la respuesta patológica son los cambios morfológicos bajo el tratamiento, siendo la reducción en el volumen tumoral el más importante, que es también predictor de supervivencia libre de recurrencia (Tardivon, 2006).

Al término del tratamiento se debe realizar otra RM para evaluar la presencia de enfermedad residual. La RM puede distinguir la respuesta de los tumores nodulares que es concéntrica, sugiriendo una mayor probabilidad de cirugía conservadora, de la respuesta de los tumores espiculados e irregulares que es de tipo dendrítica con tendencia a fragmentación más que a la disminución del volumen tumoral, lo que indica un alto riesgo de encontrar los márgenes positivos en la pieza operatoria de la mastectomía parcial (Thibault, 2004).

Una respuesta radiológica completa en la RM no significa una respuesta patológica completa y la resección del lecho tumoral sigue siendo esencial en el tratamiento quirúrgico de estas pacientes (Yeh, 2005; Rieber, 2002; Tardivon, 2006).
Otras técnicas, como el PET-FDG, han demostrado una buena correlación en la evaluación de la disminución del tamaño tumoral y en la predicción de la respuesta al tratamiento con quimioterapia; sin embargo, no se cuenta aún con estudios prospectivos definitivos que permitan recomendarlas en la práctica clínica (Fuster, 2008; Tardivon, 2006; Mann, 2008; Khouri, 2005; Schwarz-Dose, 2009; Kuroki, 2008). Lo mismo ocurre con los estudios histopatologicos y los moleculares, algunos de los cuales son dirigidos a predecir la respuesta al tratamiento sistémico (Quddus, 2005; Tewari, 2008; Di Leo, 2007).

Es recomendable el uso de marcadores radio opacos delimitando el diámetro máximo de la lesión previo al inicio de la QTNA para poder así evaluar respuesta y ayudar en la toma de decisiones quirúrgicas.

Otros estudios de evaluación molecular e histológica revisados no tienen aplicación para nuestra realidad.

Recomendaciones:

  • Estudio con mamografía, ultrasonido y RM antes del inicio del tratamiento neoadyuvante.
  • RM durante el tratamiento, después del primer ciclo de quimioterapia, evaluando el volumen tumoral.
  • RM al término del tratamiento neoadyuvante.

3. ¿Cuál es el manejo recomendado para el cáncer inflamatorio de la mama?

Síntesis de la evidencia:

Se revisaron 19 estudios en total, 7 revisiones narrativas de la literatura, 9 estudios de cohorte (8 retrospectivos y 1 prospectivo) y 3 series de casos.

La mayoría de estas publicaciones se refieren a pacientes tratadas en una institución (MD Anderson Cancer Center) (Cristofanilli, 2003; Cristofanilli, 2007; Chia, 2008; Dawood, 2008; Bristol, 2005; Singletary, 2008; Bristol, 2008; González-Angulo, 2007).

El cáncer inflamatorio (CMI) es la forma más agresiva de presentación del cáncer mamario. Desde el punto de vista molecular, constituye una entidad diferente, con determinantes biológicas claramente distintivas, que han motivado las actuales líneas de investigación terapéutica hacia la introducción de moduladores de p53, inhibidores de farnesil-transferasa y antiangiogénicos (Cristofanilli 2003 y 2007; Giordano, 2003). Al igual que en el cáncer de mama localmente avanzado, el tratamiento del CI es multimodal (Chia, 2008; Panades, 2005; Cristofanilli, 2007; Bristol, 2005; Singletary, 2008; Molckouscky, 2009; Cristofanilli, 2003; Bristol, 2005; Ardavanis, 2006) con quimioterapia como tratamiento inicial seguida de manejo loco regional.

Desde la década del 70, el cáncer inflamatorio dado su crecimiento rápido, ha sido tratado con radioterapia acelerada hiper fraccionada, lo que ha llevado a escalación de dosis. En la actualidad el tratamiento local se basa en la radioterapia acelerada e hiper fraccionada con o sin cirugía (Woodward, 2009).

Las estadísticas muestran medianas de SG de 37 meses y SLE de 32% a 5 años y de 28% a 10 y 15 años. Diferentes estudios reportan una respuesta objetiva a la QT de 72% considerando las respuestas completas y las respuestas parciales. En pacientes con respuesta clínica completa, la SG y la SLE a 15 años es de 51% y 47%, respectivamente. En las pacientes con respuesta clínica parcial (pRC), la SG y la SLE es de 44% y 31%, respectivamente. La adición de paclitaxel ha mostrado un aumento en la respuesta objetiva (Giordano, 2003; Chia, 2008) alcanzando un 79% sumando las respuestas parciales y las respuestas completas. La SG y la SLE fue de 71% y 46% a 3 años (Cristofanilli, 2003). Estudios con uso de epidoxorrubicina, vinorelbina y 5 FU (Ardavanis, 2006) alcanzan 78% de cRC+RP, con SG y SLE de 58% y 17%, respectivamente.

Nivel de evidencia II-III.

Recomendaciones:

  • Confirmación histológica.
  • Neoadyuvancia con antraciclinas y taxanos en secuencia.
  • Con respuesta clínica parcial y completa:
    a) Mastectomía radical modificada
    b) Radioterapia acelerada al lecho y regiones ganglionares

  • En caso de no haber respuesta:
    a) RT acelerada loco regional
    b) Cirugía si es factible: mastectomía radical modificada

  • Hormonoterapia si los receptores hormonales son (+).
  • Trastuzumab si Her 2 (+).

4. ¿Cuáles son las indicaciones y esquemas en quimioterapia adyuvante en el uso posterior a quimioterapia neoadyuvante?

Sintesis de la evidencia:

Se seleccionaron 5 estudios: 2 estudios de revisión no sistemática de la literatura, y 3 ensayos aleatorizados.

El estudio NSABP B-27 (Bear, 2006) comparó 3 esquemas de neoadyuvancia: a) AC x 4 b) AC x 4 + T x 4 y c) AC x 4 + cirugía + T x 4, sin encontrar diferencias en SG ni SLE en pacientes con AC vs taxanos. La adición postoperatoria de taxanos después de AC pre operatorio no afectó de forma significativa la SG, la SLE ni la incidencia de recidivas locales.
Evans (2005) comparó AC versus doxorrubicina + docetaxel, seguido de cirugía. En pacientes con linfonodos (+) se continuó la terapia con FAC x 6 en el post operatorio. La respuesta clínica completa (cRC) + la respuesta patológica completa (pRC) con AD vs AC fue 70 vs 61% respectivamente (NS) sin diferencias en SG, ni en SLE. Los resultados no permiten evaluar efecto de la QT postoperatoria. Un ensayo ABCSG-07 (Taucher, 2008) comparó QTNA CMF x 3 vs QT postoperatoria CMF x 3; en ambos grupos las pacientes con linfonodos negativos recibieron 3 ciclos adicionales de CMF, en cambio las pacientes con linfonodos positivos recibieron 3 ciclos de EC. No hubo diferencias en SG entre las ramas, pero el grupo de QT post operatoria tuvo mejor SLE (HR 0,7, p=0,024).

Las pacientes con receptores hormonales positivos deben recibir manejo hormonal postoperatorio, el que puede ser concomitante a RT (Azria, 2008; Lee, 2007; Giordano, 2003b).

Para las pacientes que sobre expresan c-erb-B2 se aconseja el uso de trastuzumab (Lee, 2007; Madarnas, 2008).

Nivel de evidencia I.

Recomendaciones:

  • No hay evidencia que apoye el uso de quimioterapia adyuvante luego del tratamiento loco regional en pacientes con CMLA que han recibido QTNA.
  • En las pacientes con receptores hormonales positivos debe agregarse hormonoterapia adyuvante luego del tratamiento loco regional.
  • En las pacientes con c-erb-B2 (+) se recomienda trastuzumab x 1 año.

5. ¿Cuáles son las indicaciones de radioterapia en cáncer de mama localmente avanzado con respuesta histológica completa y respuesta histológica parcial?

Síntesis de la evidencia:

Se revisaron 45 artículos: 1 meta análisis de ensayos aleatorios (ECA), 1 revisión de meta análisis y ECAS, 3 ECAS individuales, 2 seguimientos a largo plazo de ECA, 1 análisis de subgrupos de ECA, 21 cohortes (preferentemente retrospectivas), 6 series de casos, 2 modelos de análisis de decisión y costo efectividad, un comentario de expertos y una revisión guía clínica.

En términos globales los efectos de la radioterapia en pacientes con cáncer de mama se traducen en los siguientes beneficios (Mc Guire, 2007; Van de Steene, 2004; Ragaz, 1997; Ragaz, 2005; Whelan, 2000; Katz, 2000)

  • Disminución de recurrencia loco regional en 2/3.
  • Aumento de supervivencia global en ± 9 % a 10 años.

Nivel de evidencia I

En CMLA las indicaciones de radioterapia con evidencia de efectividad son (Aksu, 2006; Fisher, 2002; Wallgren, 2003; Overgaard, 2007):

  • Tumores T4.
  • Linfonodos (+).

Nivel de evidencia I.

Los estudios de cohorte muestran en general, que en pacientes T3 N0 sin factores de riesgo, la probabilidad de recidiva local es baja y no justifica el uso de radioterapia adyuvante de rutina.

Nivel de evidencia II.

Pese a la variedad de estudios que incluyen todas las etapas de CMLA y diversos esquemas de tratamiento, el manejo de estas etapas es multimodal con quimioterapia, radioterapia y cirugía en secuencias variables. Se considera que el beneficio de radioterapia es independiente de la respuesta histológica.

Nivel de evidencia I.

Los estudios que analizan los factores de riesgo clínico, histológico y molecular, además de modelos predictivos que podrían excluir a pacientes de tratamiento de radioterapia, no son concluyentes (Kindy, 2008; Floyd, 2006; Aksu, 2006; Taghian, 2006; Overgaard, 1997; Katz, 2000; Recht, 1999; Scepanovic, 2004; Bucholtz, 2001; Poortmans, 2007).

Nivel de evidencia II.

Recomendación:

  • Toda paciente con CMLA tiene indicación de radioterapia, independiente de la respuesta a QTNA.

6. ¿Cuáles son las indicaciones de cirugía conservadora en cáncer de mama localmente avanzado?

Síntesis de la evidencia:

Se revisaron 30 artículos que incluyen pacientes con cáncer de mama localmente avanzado; entre ellos hay revisiones narrativas de la literatura y pequeños estudios relacionados con el uso de ganglio centinela. La mayoría de éstos son cohortes y series retrospectivas. Los estudios prospectivos incluyen pocos pacientes o están dirigidos a evaluar el efecto del tratamiento sistémico.

El CMLA se debe enfrentar con un enfoque multimodal (Gralow, 2008). Varios de estos artículos consideran que la conservación de la mama post QTNA es un procedimiento seguro (Tiezzi, 2008; Clouth, 2007; Newman, 2002; Fitzal, 2007; Loibl, 2006; Veronesi, 1996; Lerouge, 2004; Mathew, 2008; Von Minckwitz, 2007; Oh, 2007).

No se ha validado la cirugía conservadora tras la QTNA en CMLA, ya que hay muy pocos ensayos controlados aleatorios específicamente orientados a este subgrupo de pacientes; la mayor parte de las pruebas provienen de estudios retrospectivos y ensayos de fase II con grupos de pacientes no homogéneos. A pesar de ello, el uso de la QTNA para la citorreducción es una opción que puede facilitar la cirugía.

Se ha encontrado una tasa más alta de recidivas (15,9%) en las pacientes tratadas con preservación mamaria, cuando en el preoperatorio no se las consideró candidatas adecuadas para la conservación de la mama en comparación con las pacientes que sí fueron consideradas inicialmente como posibles candidatas a la conservación de la mama (9,9%) p <0,04).

Una experiencia nacional al respecto ha sido satisfactoria (Campos, 2006). En una serie de 240 pacientes portadoras de tumores con una mediana de tamaño de 7 cm tratados con QTNA, se logró realizar la cirugía conservadora en un 41% de los casos con un 90% de control local, con una mediana de seguimiento de 64 meses.

La resonancia mamaria permite una adecuada monitorización de respuesta a la QTNA (Garimella, 2006).

Se sugiere que los márgenes quirúrgicos se determinen y marquen previo a la QTNA, ya que la reducción tumoral no siempre será concéntrica (Aggarwal, 2008; Lee, 2007; Yarnold, 2009; Lannin, 2007).

En cuanto al uso de la biopsia de linfonodo centinela en estos casos, ver capítulo pertinente.

Nivel evidencia II-III.

Recomendaciones:

  • Realizar estudio de imágenes pre operatoriamente al momento de planificar la cirugía de pacientes con CMLA tratadas con QTNA.
  • La indicación de cirugía conservadora en pacientes con CMLA tratadas con QTNA dependerá de la relación tamaño mama/tamaño tumor.
  • Si la relación tamaño mama/tamaño tumor no permite efectuar la cirugía conservadora en forma segura, realizar mastectomía radical modificada.

Notas y agradecimientos

Este artículo fue redactado en su versión final después de haber recibido las contribuciones y comentarios de los delegados que asistieron a la III Jornada Nacional de Diagnóstico y Tratamiento de Cáncer de Mama, realizada en Coquimbo, Chile, en agosto de 2009. A su vez, las ponencias que se presentaron en esa jornada fueron la síntesis del artículo completo de revisión de la literatura y trabajo previo de la comisión correspondiente. Este trabajo de formulación duró un año, comenzó en junio de 2008 y se llevó a cabo bajo la asesoría de Medwave Estudios Ltda., en el marco del proyecto denominado “Asesoría en la Formulación de Consenso y Recomendaciones en Cáncer de Mama Basados en la Evidencia”. El financiamiento para la ejecución de la asesoría provino de la Sociedad Chilena de Mastología.

La coordinación de la asesoría fue realizada por Vivienne Bachelet; el metodólogo jefe fue Miguel Araujo; y la metodóloga adjunta fue Gabriela Moreno. Colaboró en la sistematización bibliográfica y en el formato final de los documentos, Matías Goyenechea. El artículo definitivo es el resultado del trabajo final presentado a las jornadas de consenso, donde fue conocido, revisado y discutido por los concurrentes, y luego fue revisado por un comité editorial de pares constituido por la misma Sociedad Chilena de Mastología, tras lo cual fue enviado a Medwave para su publicación.