Análisis crítico de la literatura
← vista completaPublicado el 1 de diciembre de 2011 | http://doi.org/10.5867/medwave.2011.12.5274
Fundamentos del análisis crítico: en búsqueda de la verdad
Fundamentals of critical analysis: in search of truth
Resumen
Uno de los fundamentos más importantes para analizar críticamente los estudios clínicos es la evidencia sobre la asociación entre la calidad de un estudio y sus resultados. Esta asociación se expresa de la siguiente forma: a menor calidad metodológica, los estudios tienden a exhibir resultados más favorables a las intervenciones, es decir, tienden a sobreestimar la efectividad de las mismas. Sin embargo, como ocurre muchas veces en epidemiología, una observación no necesariamente se reproduce al estudiar nuevamente el fenómeno. También puede ocurrir que en un momento dado surge evidencia que, al contrario, encuentra que los estudios de mejor calidad tienden a mostrar efectos mayores. La relación también se da en los estudios observacionales, cuando se comparan, respecto de la evaluación de un factor de riesgo, estudios de cohorte con estudios de casos y controles. Estos últimos tienden a sobreestimar el riesgo asociado a ese factor. Existe asociación entre estudios de mejor calidad con revistas de mayor prestigio, pero no podemos inferir que todos los estudios publicados en las revistas más famosas son confiables, o viceversa.
“…tratar de seguir la información significa abandonar vigorosamente el papel del pasivo receptor y transformarse en activo intérprete, lo que, por desgracia, no garantiza hacerse con ninguna verdad alternativa. La verdad esquiva, escurridiza, requiere más esfuerzo y esperanza”1
Posibilidad de sesgo en los estudios de menor calidad
Uno de los fundamentos más importantes para analizar críticamente los estudios clínicos, es la evidencia sobre la asociación entre la calidad de un estudio y sus resultados. Esta asociación se expresa de la siguiente forma: a menor calidad metodológica, los estudios tienden a exhibir resultados más favorables a las intervenciones, es decir, tienden a sobreestimar la efectividad de las mismas. Los trabajos de Schulz y Moher aportaron pruebas empíricas de ello, respecto de los ensayos clínicos.
Sin embargo, como ocurre muchas veces en epidemiología, una observación no necesariamente se reproduce al estudiar nuevamente el fenómeno. Este y otros estudios (Clifford 2002, Emerson 1990) no demostraron asociación entre calidad y magnitud de los efectos:
O en un momento dado surge evidencia que, al contrario: encuentra que los estudios de mejor calidad tienden a mostrar efectos mayores:
La relación también se da en los estudios observacionales, cuando se comparan, respecto de la evaluación de un factor de riesgo, estudios de cohorte (“mayor validez”) con estudios de casos y controles (“menor validez”). Estos últimos tienden a sobreestimar el riesgo asociado a ese factor. En esta revisión, los estudios de casos y controles mostraron un mayor riesgo de cáncer gástrico por el consumo de carne procesada de 63%, mientras las cohortes sólo de un 24%.
Y también ocurre al comparar cohortes de mayor calidad con las metodológicamente más débiles. En esta revisión, las cohortes de menor calidad (sin ajuste de variables confusoras) mostraban que había una asociación significativa, mientras las cohortes con ajuste decían que no.
Por lo tanto, este fenómeno generalizado, bastante consistente, sugiere que las investigaciones de “menor calidad” efectivamente tienen una dosis mayor de sesgo, que desvía sus resultados, haciendo aparecer o aumentando la magnitud de las asociaciones (el efecto de la intervención, la importancia de un factor de riesgo).
¿Tienen mayor calidad los estudios publicados en las revistas de mayor prestigio?
¿Hay evidencia de asociación entre los indicadores de calidad e impacto de la revista y la de los artículos publicados en ella? Este podría ser un dato interesante para quien no desea complicarse la vida... bastaría con saber cuáles son las revistas más confiables y leer las conclusiones de los estudios contenidos en ellas.
Nuevamente, la asociación existe, pero no podemos inferir que todos los estudios publicados en las revistas más famosas son confiables, o viceversa.
¿Reflejan los resultados del análisis crítico la calidad real de un estudio?
Cuando llevamos a cabo el análisis crítico de un estudio, utilizamos los datos aportados por el autor en la publicación. Esto tiene sus limitaciones. Que el autor no haya mencionado una determinada característica del estudio no quiere decir que no la posea:
- Imagine un estudio cuyo título señala que se trata de un ensayo clínico “randomizado”. En la sección métodos, sin embargo, el autor no especifica la técnica de asignación utilizada. ¿Qué implica esto? Simplemente, que no podemos asegurar que efectivamente sea randomizado. Quizás lo sea, quizás no.
- El autor tampoco indicó si se produjeron pérdidas de seguimiento, a lo mejor porque no las hubo y por lo tanto no consideró necesario mencionarlo, o quizás porque fueron importantes y prefirió omitir el dato.
Esto ha sido evaluado formalmente:
Por ello, la calidad del reporte no debe confundirse con la calidad metodológica del estudio:
También es importante recordar que muchas veces, por desconocimiento de los métodos epidemiológicos, los autores utilizan términos inadecuados para referirse a un aspecto del diseño del estudio, o confunden conceptos.
Ejemplos de estudios que describen resultados de análisis críticos
Referidos a especialidades, patologías o tipos de intervenciones específicas:
En revistas o grupos de revistas específicas:
Otras variedades de estudio, además de los ensayos clínicos (estudios de pruebas diagnósticas, estudios observacionales):
