Resúmenes Epistemonikos
← vista completaPublicado el 18 de diciembre de 2018 | http://doi.org/10.5867/medwave.2018.08.7387
Natamicina versus voriconazol para queratitis fúngica
Natamycin versus voriconazole for fungal keratitis
Resumen
INTRODUCCIÓN La queratitis infecciosa de origen fúngico afecta principalmente a personas de países tropicales y subtropicales, y constituye una importante causa de ceguera prevenible. Los antifúngicos tópicos, en particular la natamicina y el voriconazol, se consideran efectivos, pero no está claro cuál de ellos constituye la mejor alternativa de tratamiento.
MÉTODOS Realizamos una búsqueda en Epistemonikos, la mayor base de datos de revisiones sistemáticas en salud, la cual es mantenida mediante el cribado de múltiples fuentes de información, incluyendo MEDLINE, EMBASE, Cochrane, entre otras. Extrajimos los datos desde las revisiones identificadas, analizamos los datos de los estudios primarios, realizamos un metanálisis y preparamos una tabla de resumen de los resultados utilizando el método GRADE.
RESULTADOS Y CONCLUSIONES Identificamos tres revisiones sistemáticas que en conjunto incluyeron tres estudios primarios, todos correspondientes a ensayos aleatorizados. Concluimos que natamicina probablemente se asocia a mejor agudeza visual tras la infección, y que previene la perforación corneal y/o la necesidad de realizar queratoplastia terapéutica en comparación a voriconazol en queratitis fúngica.
Problema
La queratitis fúngica corresponde a una infección micótica de la córnea, principalmente del epitelio y del estroma. Los agentes etiológicos más frecuentes corresponden, en primer lugar, a hongos filamentosos de los géneros Fusarium, Aspergillus y Curvularia, en orden descendente de frecuencia y, en segundo lugar, a levaduras. En países tropicales y subtropicales constituye una importante causa de ceguera prevenible, en contraposición a lo que ocurre en países desarrollados, donde afecta escasamente a la población. El principal factor de riesgo corresponde al trauma ocular asociado a contaminación con material vegetal, pero también se ha visto asociada al uso de corticoides, antibióticos, inmunosupresores, quimioterápicos y uso de prótesis oculares.
Existen múltiples agentes antifúngicos tópicos para el tratamiento, tales como, polienos (natamicina, anfotericina B), imidazoles (ketoconazol, econazol) y triazoles (fluconazol, posaconazol). El tratamiento de elección ha sido por décadas la natamicina de uso tópico, único antifúngico aprobado por la Food and Drugs Administration (FDA), pero la reciente aparición de voriconazol tópico, un triazol de segunda generación de amplio espectro, ha planteado nuevas interrogantes, surgiendo, así, la necesidad de evaluar cuál de los dos antifúngicos tópicos se presenta como la mejor alternativa terapéutica.
Métodos
Realizamos una búsqueda en Epistemonikos, la mayor base de datos de revisiones sistemáticas en salud, la cual es mantenida mediante búsquedas en múltiples fuentes de información, incluyendo MEDLINE, EMBASE, Cochrane, entre otras. Extrajimos los datos desde las revisiones identificadas y analizamos los datos de los estudios primarios. Con esta información, generamos un resumen estructurado denominado FRISBEE (Friendly Summaries of Body of Evidence using Epistemonikos), siguiendo un formato preestablecido, que incluye mensajes clave, un resumen del conjunto de evidencia (presentado como matriz de evidencia en Epistemonikos), metanálisis del total de los estudios cuando sea posible, una tabla de resumen de resultados con el método GRADE y una sección de otras consideraciones para la toma de decisión.
Mensajes clave
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Acerca del conjunto de evidencia para esta pregunta
Cuál es la evidencia |
Encontramos tres revisiones sistemáticas [1], [2], [3] que incluyeron tres estudios primarios reportados en siete referencias [4], [5], [6], [7], [8], [9],[10], todos correspondientes a ensayos controlados aleatorizados. |
Qué tipo de pacientes incluyeron los estudios* |
Todos los ensayos incluyeron pacientes hombres y mujeres mayores de 16 años con una edad promedio de 46,7 años, con evidencia microbiológica de queratitis fúngica; visualización directa de hifas en raspado corneal mediante frotis con tinción de KOH al 10% o tinción de Gram [5], frotis con tinción de KOH al 10%, tinción de Giemsa o de Gram [4] y frotis de úlcera corneal positivo para hongos en pacientes con agudeza visual de 20/40 (0,3 unidades logMAR) a 20/400 (1,3 unidades logMAR) [8]. Todos los ensayos excluyeron a pacientes que tuvieran coinfección corneal concomitante (viral, bacteriana o protozoaria), signos de perforación corneal inminente o historia de perforación corneal [4], [5], [8]. Dos ensayos [4], [8] excluyeron a pacientes con agudeza visual peor que 20/200 (1,0 unidades logMAR) en el ojo no afectado y con úlceras bilaterales. Dos ensayos excluyeron a pacientes sin percepción de luz en el ojo afectado [4], [5], y un ensayo además excluyó a pacientes embarazadas[4]. |
Qué tipo de intervenciones incluyeron los estudios* |
Todos los ensayos utilizaron como intervención natamicina tópica 5%: dos ensayos administraron 1 gota cada hora durante 1 semana y luego 1 gota cada 2 horas durante 2 semanas (mientras el paciente estaba despierto) [4], [8] y un ensayo 1 gota cada hora durante 2 semanas [5]. Como comparación se utilizó voriconazol tópico 1%: en dos ensayos se administró 1 gota cada hora durante 1 semana y luego cada 2 horas durante 2 semanas (mientras el paciente estaba despierto) [4], [8] y un ensayo administró 1 gota cada hora durante 2 semanas [5]. |
Qué tipo de desenlaces midieron |
Los ensayos evaluaron múltiples desenlaces, los cuales fueron agrupados en las revisiones sistemáticas de la siguiente forma:
El seguimiento promedio de los ensayos fue de 11,3 semanas con un intervalo que fluctuó entre 10 y 12 semanas. |
* La información sobre los estudios primarios es extraída desde las revisiones sistemáticas identificadas, no directamente desde los estudios, a menos que se especifique lo contrario.
Cuál es la evidencia
Resumen de los resultados
La información sobre los efectos de natamicina tópica 5% versus voriconazol tópico 1% está basada en tres ensayos aleatorizados que incluyeron 473 pacientes [5], [6], [8].
Un ensayo reportó el desenlace cura clínica (30 pacientes) [5], tres ensayos reportaron cambio en la agudeza visual (logMAR), y perforación corneal y/o necesidad de realizar queratoplastia terapéutica (434 pacientes) [5], [6], [8].
El resumen de los resultados es el siguiente:
- El uso de natamicina en queratitis fúngica, en comparación con voriconazol, podría asociarse a una mayor probabilidad de cura clínica, pero la certeza de la evidencia es baja.
- El uso de natamicina en queratitis fúngica, en comparación con voriconazol, probablemente se asocia a una mejor agudeza visual. La certeza de la evidencia es moderada.
- El uso de natamicina en queratitis fúngica, en comparación con voriconazol, previene la perforación corneal y/o la necesidad de realizar queratoplastia terapéutica. La certeza de la evidencia es alta.
Siga el enlace para acceder a la versión interactiva de esta tabla (Interactive Summary of Findings - iSoF) |
Otras consideraciones para la toma de decisión
A quién se aplica y a quién no se aplica esta evidencia |
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Sobre los desenlaces incluidos en este resumen |
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Balance riesgo/beneficio y certeza de la evidencia |
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Consideraciones de recursos |
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Qué piensan los pacientes y sus tratantes |
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Diferencias entre este resumen y otras fuentes |
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¿Puede que cambie esta información en el futuro? |
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Cómo realizamos este resumen
Mediante métodos automatizados y colaborativos recopilamos toda la evidencia relevante para la pregunta de interés y la presentamos en una matriz de evidencia.
Siga el enlace para acceder a la versión interactiva: Natamicina versus voriconazol para queratitis fúngica.
Notas
Si con posterioridad a la publicación de este resumen se publican nuevas revisiones sistemáticas sobre este tema, en la parte superior de la matriz se mostrará un aviso de “nueva evidencia”. Si bien el proyecto contempla la actualización periódica de estos resúmenes, los usuarios están invitados a comentar en la página web de Medwave o contactar a los autores mediante correo electrónico si creen que hay evidencia que motive una actualización más precoz.
Luego de crear una cuenta en Epistemonikos, al guardar las matrices recibirá notificaciones automáticas cada vez que exista nueva evidencia que potencialmente responda a esta pregunta.
Este artículo es parte del proyecto síntesis de evidencia de Epistemonikos. Se elabora con una metodología preestablecida, siguiendo rigurosos estándares metodológicos y proceso de revisión por pares interno. Cada uno de estos artículos corresponde a un resumen, denominado FRISBEE (Friendly Summary of Body of Evidence using Epistemonikos), cuyo principal objetivo es sintetizar el conjunto de evidencia de una pregunta específica, en un formato amigable a los profesionales clínicos. Sus principales recursos se basan en la matriz de evidencia de Epistemonikos y análisis de resultados usando metodología GRADE. Mayores detalles de los métodos para elaborar este FRISBEE están descritos aquí (http://dx.doi.org/10.5867/medwave.2014.06.5997)
La Fundación Epistemonikos es una organización que busca acercar la información a quienes toman decisiones en salud, mediante el uso de tecnologías. Su principal desarrollo es la base de datos Epistemonikos (www.epistemonikos.org).
Declaración de conflictos de intereses
Los autores declaran no tener conflictos de intereses con la materia de este artículo.
