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Formación con simulación clínica para manejo adecuado de emergencias obstétricas: revisión narrativa

Clinical simulation training for the adequate management of obstetrics emergencies: A narrative review

Resumen

Las emergencias obstétricas son situaciones críticas que amenazan la salud de la madre y del bebé durante el embarazo o el parto. Este estudio se enfocó en validar la efectividad de la formación con simulación clínica en el manejo de estas situaciones. Realizamos una revisión narrativa de estudios publicados entre 2008 y 2022, recopilados de las bases de datos Scopus, ScienceDirect, MEDLINE/PubMed, Springer, SciELO y Google Scholar. Se recogieron y resumieron los datos de los estudios que cumplían con nuestros criterios de inclusión. Nuestros resultados subrayan que la simulación clínica se posiciona como una herramienta altamente eficaz en la formación de profesionales de la salud. Esta capacitación se traduce en mejoras significativas en diversos aspectos, incluyendo el rendimiento, los conocimientos, la confianza, la satisfacción, las actitudes, la autoeficacia, la capacidad para trabajar en equipo y las habilidades necesarias para enfrentar situaciones obstétricas críticas. Dentro de estas últimas destacan hemorragias posparto, eclampsia, distocia de hombros, paro cardíaco materno, prolapso del cordón umbilical y cesáreas. Esta formación disminuye los riesgos asociados con el aprendizaje en pacientes reales y cumple con los estándares éticos. La colaboración interdisciplinaria en el manejo de emergencias obstétricas se revela efectiva para brindar atención integral a los pacientes. Sin embargo, es fundamental enfatizar que para asegurar la seguridad del paciente y promover un enfoque de trabajo en equipo, es esencial que los profesionales de la salud reciban una formación adecuada y estén debidamente cualificados. A pesar de que la formación en simulación clínica es eficaz, su implementación puede resultar costosa y requerir recursos considerables. No obstante, consideramos que esta estrategia sigue siendo de un valor incalculable para la formación de profesionales en este campo. Investigaciones futuras de alta calidad contribuirán a fortalecer la evidencia sobre las mejores prácticas en la formación con simulación clínica en emergencias obstétricas.

Ideas clave

  • Las emergencias obstétricas pueden amenazar la vida de la madre y del recién nacido y necesitan atención adecuada.
  • Este trabajo puede servir de guía a educadores e investigadores que planean, desarrollar, probar y/o implementar la formación con simulación clínica, tanto en el manejo emergencias obstétricas como en otros ámbitos
  • Como limitación, es posible que los estudios experimentales puedan aportar resultados más pertinentes para este estudio.

Introducción

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2020 la tasa anual de mortalidad materna fue de 287 000 pacientes y la tasa de mortalidad neonatal fue de 2,4 millones [1]. Por ello, mejorar la atención materna, fetal y neonatal durante el parto es un objetivo importante de desarrollo para la OMS [2]. El acceso a una asistencia cualificada en el parto y a cuidados de emergencias obstétricas de calidad son factores importantes para mejorar la mortalidad materna y perinatal [3]. Una de las recomendaciones de la OMS es mejorar el manejo de las emergencias obstétricas a través de la formación con simulación clínica [4]. Este método constituye una técnica de formación para los profesionales de la salud orientada a lograr una comprensión sustancial, mejorar y difundir los conocimientos, las habilidades y las actitudes de los profesionales de la salud [5].

La obstetricia constituye un campo de considerable riesgo, en el que ocasionalmente se presentan situaciones de emergencia capaces de poner en peligro la vida de la madre y del recién nacido [6]. Las emergencias obstétricas conllevan con frecuencia cambios rápidos y el equipo profesional se enfrenta a diversas situaciones que demandan la toma de decisiones en condiciones de elevada presión. Numerosos estudios han evidenciado la eficacia de la formación mediante simulación en obstetricia, con el propósito de mejorar la seguridad durante el proceso de parto tanto para las madres como para los recién nacidos [7].

De acuerdo con el estudio de Michelet et al (2019), se ha empleado la simulación con el propósito de desarrollar habilidades tanto técnicas como no técnicas en situaciones de emergencias obstétricas específicas, tales como la distocia de hombros, la hemorragia posparto, la eclampsia y el prolapso del cordón umbilical [8]. El manejo adecuado de estas situaciones requiere la colaboración de diferentes disciplinas y la coordinación ágil del equipo. Conocimientos y habilidades en el trabajo en equipo permiten adaptarse a cambios y aprender de experiencias [9]. Las emergencias obstétricas suelen ser eficazmente tratadas por equipos multidisciplinarios competentes y oportunos [6]. Fortalecer la colaboración y comunicación es crucial para una atención de calidad. No obstante, aunque profesionales de distintas disciplinas trabajen juntos, a veces luchan por comunicarse eficazmente [10].

La seguridad de los pacientes, los profesionales y los beneficiarios de los servicios de salud es fundamental. En consecuencia, las situaciones de rápida transformación requieren un trabajo de equipo profesional altamente competente. El manejo defectuoso de las emergencias obstétricas a menudo se vincula con la competencia del equipo, y su incompetencia puede llegar a ser catastrófica [9,11].

La formación clínica convencional en situaciones reales ha progresado hacia la formación con simulación. Debido a los rápidos avances en la tecnología médica, la aplicación de conocimientos recién adquiridos en pacientes reales resulta inaceptable por razones éticas y médico-legales [12]. La idea de aprender con pacientes reales con la posibilidad de cometer errores está siendo cada vez menos aceptado [13].

La simulación obstétrica es considerada un campo novedoso, aunque su uso se remonta a épocas prehistóricas. Registros arqueológicos revelan que los ancestros del pueblo Mansai en Siberia creaban modelos de parto con medidas reales de mujeres en cuero, empleándolos para facilitar el proceso de nacimiento [7]. En el siglo XVIII, Madame du Coudray ejerció como partera real en Francia, utilizando un maniquí de cuero a tamaño real para instruir a las mujeres, lo que contribuyó a disminuir la mortalidad materno-infantil [14].

La formación con simulación clínica en el manejo de emergencias obstétricas presenta notables beneficios frente a la formación clínica convencional. Esta metodología permite a los profesionales de la salud practicar en entornos controlados situaciones realistas, lo que refuerza la toma de decisiones y las habilidades técnicas [14].

Investigaciones recientes respaldan que la formación con simulación resulta en una retención de conocimientos y confianza más altas en emergencias obstétricas, en comparación con la formación clínica convencional. Además, proporciona un entorno seguro para cometer errores y aprender de ellos, lo que contribuye a una mejora constante en la competencia clínica [15]. La combinación de aspectos técnicos y no técnicos en la capacitación con simulación puede ser crucial para una atención efectiva y segura [16]. Utilizar la simulación clínica como herramienta para aprender a manejar emergencias obstétricas representa una innovación que busca elevar la seguridad de las pacientes, fetos y recién nacidos [17]. Sarfati et al [18], quienes llevaron a cabo una revisión sistemática en MEDLINE/PubMed abarcando el período de 2000 a 2015, fusionando términos como Patient Simulation, Medication Errors y Simulation Healthcare; concluyeron que la simulación clínica resulta efectiva para capacitar al personal, tanto en procedimientos estándar como en situaciones excepcionales. Ello, al integrar aspectos humanos y el riesgo iatrogénico de los errores médicos [18].

El rendimiento clínico de los equipos de atención obstétrica está vinculado a la calidad de sus aptitudes de trabajo en equipo, más que el rendimiento individual. Los equipos con un rendimiento clínico satisfactorio detectan las emergencias de manera anticipada y mantienen una comunicación efectiva internamente [19]. En el contexto del manejo de las emergencias obstétricas, la formación interdisciplinaria con simulación resulta efectiva para mejorar el desarrollo del equipo [6]. La formación interprofesional busca involucrar a diversos profesionales en un intercambio de aprendizaje, fomentando una práctica colaborativa y una atención sanitaria mejorada [20]. La formación con simulación es valiosa debido a sus oportunidades de práctica continua y enfocada, permitiendo a los profesionales de la salud adquirir conocimientos y habilidades sin exponer a los pacientes a riesgos [19].

El objetivo de la presente revisión es conocer la efectividad de la formación con simulación clínica para capacitar a profesionales de la salud en el manejo adecuado de emergencias obstétricas. Para ello se parte del supuesto en que la formación con simulación clínica es efectiva para el manejo adecuado de las emergencias obstétricas.

Métodos

Se trata de una revisión narrativa de la literatura, que analiza los artículos recuperados de las bases de datos bibliográficas Scopus, ScienceDirect, MEDLINE/PubMed, Springer, SciELO y Google Scholar entre 2008 y 2022. En la estrategia de búsqueda se incluyeron las siguientes palabras clave "emergencias, obstétricas", "formación con simulación clínica", "trabajo en equipo" y "eficacia". Los estudios se seleccionaron de acuerdo con los siguientes criterios de inclusión:

  1. Estudios de diseño observacional, cualitativo, cuasi experimental, ensayos clínicos.

  2. Estudios sobre la formación con simulación clínica para el manejo de emergencias obstétricas.

  3. Estudios publicados en inglés o español.

  4. Los profesionales y los estudiantes de la salud constituyen la población.

Resultados y discusión

El uso de la simulación clínica se ha convertido en una parte habitual de la formación para los profesionales de la salud en numerosas instituciones educativas de salud. El objetivo de este estudio fue validar la eficacia de la formación con simulación clínica para capacitar a profesionales de la salud en el manejo adecuado de emergencias obstétricas.

En esta revisión, definimos como resultados cualquier medición informada para validar la eficacia de la formación con simulación de los profesionales de la salud para el manejo adecuado de emergencias obstétricas (por ejemplo, conocimiento, confianza y rendimiento). Los detalles sobre los métodos utilizados para medir los resultados, así como los resultados específicos de cada uno de los estudios incluidos, se pueden encontrar en la Tabla 1.

Descripción de características de los estudios incluidos.
Ver tabla

La formación con simulación clínica, realizada en los artículos seleccionados, reproduce de manera general algunas de las principales emergencias obstétricas [3,7,21,22,35,37]. De manera específica aborda la hemorragia posparto [3,8,23,24,25,29,36], la eclampsia [3,26,27], la distocia de hombros [3,24,27,28,29,36], el paro cardíaco materno [30,31], el prolapso del cordón umbilical [32] y la cesárea [33] en entornos controlados, utilizando simuladores de alta, media y baja fidelidad.

Algunos autores que evaluaron los resultados de la formación con simulación destacaron que la intervención mejoró el rendimiento [8,23,25,26,27,28,29,30,31,32,37], el conocimiento [3,7,21,22,25,30,33], la confianza [21,24,30], la satisfacción [22,33,34], las actitudes [36] y la autoeficacia [3]. Además, la formación con simulación tuvo un impacto positivo en las habilidades (tanto prácticas como de comunicación) [7,33,35], la autocompetencia y la conciencia [10], así como en el trabajo en equipo [3,26]

Sami et al [21] en un estudio cuasi experimental demostraron que la formación con simulación favorece la adquisición y retención de conocimientos, así como la confianza [21]. También, en otro estudio cuasi experimental, Osman et al [22] demostraron que este método de formación aumenta el conocimiento, la confianza y la satisfacción de los participantes [22].

En este contexto, la simulación se consolida de manera sólida como un elemento esencial en la formación de equipos obstétricos, mejorando su preparación y su capacidad de respuesta ante situaciones de emergencia. La relevancia fundamental de estos hallazgos se hace evidente al considerar la complejidad y la gravedad inherente de las situaciones obstétricas abordadas en los estudios. Estos abarcan desde el manejo de la hemorragia posparto, la eclampsia, la distocia de hombros, el paro cardíaco materno, el prolapso del cordón umbilical y la cesárea.

A continuación, presentaremos los resultados y el análisis específicamente para todas las emergencias obstétricas abordadas en este estudio.

Hemorragia posparto

La hemorragia posparto es una emergencia obstétrica y una de las principales causas de morbilidad y mortalidad materna en todo el mundo. Es responsable del 27,1% de las muertes maternas a nivel global [38]. En un estudio cuasi experimental, Pansuwan et al (2012) examinaron cómo el uso de escenarios simulados en un laboratorio afectó el rendimiento de enfermería en el manejo de la hemorragia posparto temprana. Los resultados mostraron mejoras en el cuidado de mujeres con esta condición [23]. En otro estudio cuasi experimental, Andrighetti et al [24] mostraron que la formación basada en simulación aumenta la confianza de los estudiantes de partería en el manejo de hemorragia posparto [24]. También, en un ensayo clínico aleatorio destinado a examinar el efecto de un programa de formación con la simulación sobre los conocimientos y el rendimiento de las parteras, tanto los conocimientos como el rendimiento relacionados con el cuidado de la hemorragia posparto se mejoraron significativamente tras la formación. Sin embargo, para evaluar adecuadamente la eficacia de la formación con la simulación, deben estudiarse los efectos a largo plazo sobre el rendimiento, los conocimientos y los resultados clínicos en el cuidado de las complicaciones obstétricas [25]. Los hallazgos de la investigación indican que la formación con simulación es fundamental para los profesionales de la salud para el manejo de la hemorragia posparto.

Eclampsia

La eclampsia se refiere a la aparición de al menos de una convulsión generalizada entre las pacientes que tienen criterios de preclampsia y que no tienen otras enfermedades neurológicas [39]. Se trata de una emergencia obstétrica rara y potencialmente mortal, que se produce entre el 2 y 3% de las mujeres preclámpticas graves que no reciben profilaxis [26]. La formación de los profesionales de salud que prestan atención obstétrica es vital para los cuidados de la eclampsia, que es una importante causa de morbilidad y mortalidad materna y perinatal. Deering et al [39] demostraron que la formación con la simulación fue más eficaz que el aprendizaje tradicional en el manejo de la eclampsia [39]. Ellis et al [26] publicaron un ensayo clínico aleatorio en el que se examinaban los efectos de la formación con la simulación sobre la eficacia clínica de los equipos. En el estudio, la simulación demuestra que los equipos completaron las tareas básicas en la intervención de la preclampsia en una mayor proporción, la administración del sulfato de magnesio se realizó en menor tiempo, proporcionó un mejor trabajo en equipo y un alto rendimiento [26]. Los resultados del estudio muestran que la formación con la simulación es necesaria para los profesionales de la salud en el manejo de preclampsia.

Distocia de hombros

Los casos de la distocia de hombros son raros y difíciles de predecir. Sin embargo, existen directrices basadas en la evidencia sobre el manejo de esta emergencia, que comporta complicaciones a largo plazo muy costosas, como la encefalopatía isquémica hipóxica y las lesiones del plexo braquial [40]. Mediante un ensayo clínico aleatorizado, Daniels et al [27] han demostrado que la formación con la simulación fue más eficaz que la formación tradicional en el manejo de la distocia de hombros [27]. El uso de la simulación para abordar los efectos de la distocia de hombros es probablemente una de las mejores áreas de estudio de la simulación obstétrica. En un estudio cuasi experimental, Kordi et al [28] compararon el impacto de la formación basada en simulación y la técnica oral en la habilidad de parteras en el manejo de la distocia de hombros. Los resultados mostraron mejoras en el rendimiento de parteras [28]. Fransen et al (2015), en un estudio clínico aleatorizado indicaron el aumento del rendimiento de los equipos obstétricos multiprofesionales y la reducción de traumatismos por distocia de hombros [29]. Estos resultados mostraron que la formación con la simulación se pudo utilizar eficazmente en el manejo de la distocia de hombros.

Paro cardíaco materno

El paro cardíaco se define como un evento dramático que ocurre rápidamente y sin aviso, con pérdida de la conciencia tras un cese de la circulación de la sangre por la arteria coronaria, la cual se desvía al cerebro [41]. Los estudios sobre los paros cardíacos en la población adulta general muestran que puede ser posible mejorar los resultados de los pacientes en caso de paro [42]. La atención de una paciente embarazada que sufre un paro cardíaco es distinta a la de un adulto en general, ya que el equipo debe tener en cuenta la fisiología específica del embarazo y el estado del feto durante la reanimación [43]. Los estudios sobre el manejo de los paros cardíacos maternos demuestran que la simulación tiene un efecto benéfico para mejorar las habilidades de los profesionales de la salud. Fisher et al [30] realizaron un estudio para determinar el efecto de la formación con la simulación en el manejo del paro cardíaco materno sobre el rendimiento, los conocimientos y la confianza de 19 participantes profesionales de la salud materno-fetal. Según los resultados del estudio, los participantes mostraron una mejoría estadísticamente significativa en el establecimiento oportuno de la reanimación cardiopulmonar y el parto por la cesárea perimortem [30]. Lipman et al [31] han evaluado 18 vídeos de casos de la simulación que implican una embolia de líquido amniótico materno y el consiguiente paro cardíaco. Aunque todos los participantes estaban certificados según las recomendaciones de la American Heart Association para los cuidados avanzados de la reanimación, se encontraron insuficiencias en la práctica de la reanimación cardiopulmonar durante los paros simulados. En el estudio, 56% de las compresiones adecuadas y 50% de las ventilaciones fueron realizadas por los equipos en el momento oportuno [31]. Dado que el paro cardíaco materno y la cesárea perimortem son raras, la intervención adecuada en la madre y en el recién nacido están directamente relacionadas con la preparación y la familiaridad del equipo de los cuidados. Con la formación por la simulación, el equipo de cuidados obstétricos tendrá la oportunidad de practicar y evaluar resultados.

Prolapso del cordón umbilical

El prolapso del cordón umbilical puede ser oculto o manifiesto. Se produce cuando un fragmento del cordón umbilical avanza a lo largo o por delante de la presentación fetal. Esto lo hace susceptible de la compresión por la parte que se presenta, pudiendo provocar la asfixia fetal. Este evento ocurre en el 0,18% de los partos de los nacidos vivos [44]. Un estudio llevado a cabo en una gran maternidad del Reino Unido, demostró que la aplicación de un protocolo simulado del manejo del prolapso del cordón umbilical fue eficaz. Esta medida se asoció con una reducción significativa del tiempo medio entre el diagnóstico y el parto [32]. Los resultados del estudio mostraron que la formación con simulación puede ser eficaz y fiable para prevenir la mortalidad y la morbilidad materno-fetal vinculada con el prolapso del cordón umbilical.

Cesárea

La cesárea es un procedimiento muy frecuente que puede conllevar importantes complicaciones, especialmente cuando se trata de una incisión abdominal o cuando se realiza de manera urgente [45]. Por lo tanto, la formación con la simulación de la cesárea puede resultar útil para los profesionales de la salud. Vellanki et al [33] compararon un modelo de cesárea simulada y la capacitación habitual en la formación de una clase de nuevos internos en un ensayo clínico aleatorio. Según el resultado del estudio, se demostró que los estudiantes de medicina formados con la simulación fueron más aptos para identificar las fases del acto de cesárea. Además, los estudiantes tenían mayor bienestar durante el acto [33]. La formación con la simulación puede utilizarse para eliminar las barreras identificadas y reducir el tiempo de la intervención en una cesárea de emergencia, así como permitir al equipo el perfeccionar sus habilidades.

Simulación clínica interdisciplinar en las emergencias obstétricas

Numerosos esfuerzos para mejorar los resultados en obstetricia se han enfocado en técnicas y en aumentar los conocimientos médicos. Sin embargo, se ha reconocido que gran parte de las complicaciones y morbilidad se derivan de una intervención de equipo ineficaz, no de fallos individuales. La carencia de estas dinámicas del trabajo en equipo se identifica como un factor crucial que contribuye a cerca del 75% de los errores médicos prevenibles [37]. Gum et al [34] llevaron a cabo un estudio cualitativo para investigar cómo la formación con la simulación mejora la atención de emergencia materna y el desarrollo del equipo. Los resultados del estudio indicaron que los participantes destacaron cómo la simulación facilitó la reflexión y la evaluación de las habilidades de liderazgo del equipo, además de revisar el papel del liderazgo en escenarios de emergencia. El estudio señaló que la formación brindaba a los participantes la oportunidad de tener un objetivo común (el bienestar del paciente), lo que fomentaba el respeto mutuo, aumentaba la confianza entre los miembros del equipo y les permitía aprender mutuamente [34]. Asimismo, Hernández et al (2021) realizaron un estudio para analizar el impacto y evaluar los efectos de la formación con simulación de emergencias obstétricas en grupo multidisciplinar. Los resultados del estudio indicaron que los niveles de habilidades y la satisfacción de los participantes han sido mejorados [35]. Reeves et al [20] informaron que las simulaciones normalizadas para el manejo de emergencias obstétricas y la formación en seguridad del paciente, son beneficiosas para mejorar la reactividad y las habilidades de los miembros del equipo, así como los resultados para las pacientes [20]. En un estudio que involucró a parteras, enfermeras y obstetras, se investigó si la formación con simulación estaba relacionada con cambios percibidos en la autoeficacia y la eficacia colectiva en el manejo de la hemorragia posparto. Los resultados demostraron un aumento significativo en los niveles de autoeficacia y eficacia colectiva del grupo de participantes después de la formación [25]. En otro estudio que involucró a estudiantes de medicina y partería, que evaluó las actitudes interprofesionales y los conocimientos clínicos tras una formación con simulación, los resultados evidenciaron una mejora en las actitudes interprofesionales [36].

En la investigación llevada a cabo por Walker et al [3], que abarcó escenarios de hemorragia obstétrica, distocia de hombros, preclampsia/eclampsia y reanimación neonatal; se formó a 450 profesionales de la salud en equipos interdisciplinarios, observándose un aumento significativo en el conocimiento y la autoeficacia, tanto de los médicos como de las enfermeras en cada área [3]. El manejo inadecuado de emergencias obstétricas puede resultar en graves traumatismos y la muerte de la madre, el feto y el recién nacido. El enfoque interdisciplinario en la formación con simulación mejora el rendimiento del equipo, y garantiza una atención de calidad al aumentar la seguridad de los pacientes.

Fortalezas y limitaciones

Una de las fortalezas del estudio radica en la diversidad de fuentes de datos que se recopilaron, incluyendo diferentes tipos de investigaciones y la participación de diversos países. Sin embargo, es importante destacar que no se llevó a cabo una evaluación de la calidad de los estudios incluidos. Esta decisión fue congruente con nuestros objetivos, pero al mismo tiempo limita la aplicabilidad de nuestros resultados. Además, los métodos utilizados para sintetizar los datos no tuvieron en consideración las posibles diferencias en las muestras de los estudios, ni la calidad de la metodología utilizada en los mismos. También es relevante señalar que nuestros criterios de inclusión fueron específicos, y es posible que hayan excluido la incorporación de artículos que podrían haber sido pertinentes para el tema de investigación. Esto incluye la posibilidad de no haber considerado estudios realizados con otros profesionales de la salud que brindan cuidados de emergencia, en contextos diferentes a los que se abordaron en este estudio.

Los hallazgos de esta revisión tienen el potencial de ofrecer orientación a educadores e investigadores que estén planeando, desarrollando, evaluando o implementando, programas de formación basados en simulación clínica, ya sea en el contexto de las emergencias obstétricas o en otros campos de aplicación.

Es fundamental continuar investigando para profundizar en este aspecto esencial de la formación con simulación. Investigaciones futuras de alta calidad contribuirán a fortalecer la evidencia sobre las mejores prácticas en la formación con simulación clínica en emergencias obstétricas.

Conclusiones

Los resultados de este estudio proporcionaron pruebas concluyentes en cuanto a afirmar que la formación con la simulación clínica de los equipos de salud en el manejo de las emergencias obstétricas, fue eficaz para desarrollar las habilidades de los profesionales de la salud y preparar a los equipos para responder adecuadamente a las situaciones de emergencia. Sus aplicaciones eran proporcionales a un mejor rendimiento. Por lo tanto, la implementación de la formación con simulación para el manejo de emergencias obstétricas, debe considerarse una estrategia potencialmente indispensable para mejorar la prestación de cuidados de la salud maternal y neonatal.

No obstante, las intervenciones de simulación pueden consumir mucho tiempo y requieren muchos recursos. Los educadores y los investigadores deben ser conscientes de estos retos a la hora de plantear las estrategias de la formación con simulación. A pesar de las eventuales limitaciones asociadas al uso de la simulación, esta estrategia de formación se consideró positiva para el proceso de aprendizaje de los profesionales de la salud en el manejo de las emergencias obstétricas.